Pasajero Jueves, 25 julio 2019

El placer de no entender (2). Cuatro argentinos hablan

Ayer publiqué una nota sobre la importancia que tiene, para nuestra formación, acercarnos a manifestaciones artísticas que no terminamos de comprender. Mientras escribía la nota, recordé algunas declaraciones (todas en video) realizadas por escritores e intelectuales argentinos que hablan sobre el valor de no entender, leer desde el margen o, de plano, leer mal, como virtudes que enriquecen la lectura en lugar de limitarla o entorpecerla.

argentinos

Los escritores argentinos Ricardo Piglia, Beatriz Sarlo, Martín Kohan y Jorge Luis Borges

Reúno aquí esas declaraciones porque creo que sirven para explicar mejor el post anterior. También, porque quisiera resaltar el espacio donde se produjeron: casi todos, PROGRAMAS DE TELEVISIÓN transmitidos en Argentina, a los que podemos acceder a través de YouTube. Aun con la crisis, aun con todas las crisis, Argentina no ha dejado de generar espacios de discusión como estos. Nosotros, en este momento, y al menos hasta donde sé, no tenemos un solo producto de naturaleza similar, salvo algunas iniciativas académicas conducidas por universidades y centros culturales.

Beatriz Sarlo

La intelectual Beatriz Sarlo (1942), hablando sobre las experiencias que marcaron su formación, destaca el impacto que, para ella, tuvo no entender.  (El fragmento citado va del minuto 16:30 al 17:35).

El segundo impacto fue no entender, no hay experiencia cultural mejor que no entender. Las mejores experiencias son las que vienen en shock […] Mi [primera] experiencia de no entender fue un Beckett puesto por [Jorge] Petraglia […] Yo no sabía lo que era ese teatro, supongo que era Esperando a Godot, supongo… pero lo que fue es atravesar una hora y media en un mundo… es como si me hubieran tirado a Marte o a Júpiter. Entonces, la experiencia cultural del no entender es fundamental. Yo estoy en contra de aquellos que piensan que hay que convertir en papilla las cosas para que después la gente se alimente con un guiso mal cocido. No. La experiencia del shock, en el arte, es fundamental.

Esta entrevista forma parte del programa La Clase, conducido por Carlos Ares. Se transmite por Canal de la Ciudad.

La misma Beatriz Sarlo habla sobre la importancia de la educación del gusto: no se trata solo de entender o disfrutar, sino de formarnos para hacerlo. En esta entrevista para el programa Diálogos, de la Universidad Nacional del Litoral (UNL), cuenta la siguiente anécdota (el fragmento citado va del minuto 12:54 al 14:08):

[En el Centro Editor] trabajaba uno de los diseñadores gráficos más originales de la Argentina, Oscar Díaz, el Negro Díaz, que sin duda nos impartía, sin quererlo, […] lecciones clarísimas sobre arte contemporáneo. Yo recuerdo la que más me impactó: entré a la Oficina de Diseño del Centro Editor, y no sé qué tomé, una reproducción de alguien, de un artista. La miré así y dije: «No me gusta» y, con la soberbia que me caracterizaba, la tiré sobre una mesa. Yo tendría 24 años, y el Negro Díaz, que tendría 40, me dijo: «Bueno, agarrala de nuevo, y mirala hasta que te guste». Creo que es la máxima lección de crítica que recibí nunca.  

Ricardo Piglia

En sus conferencias sobre Borges, Ricardo Piglia (1941-2017) mencionaba que una amiga suya, refiriéndose al cuento Tlön, Uqbar, Orbis Tertius (1940), le dijo: “¿Sabes que lo leo y no lo entiendo todavía?”. Inmediatamente, ante la risa del público, Piglia aclaraba la anécdota con una pregunta: “¿Qué quiere decir entender?”. Por supuesto que su amiga había comprendido la trama y, sin embargo, a cada relectura, encontraba más elementos, más interpretaciones. Nunca podía decir: ya está, ya lo entendí todo sobre este cuento.

A lo largo de estas clases (especialmente la primera y la segunda), Piglia insiste en su tesis de Borges como un lector miope, microscópico (recordemos que Borges se quedó ciego alrededor de los cincuenta años): un lector que encuentra elementos en serie, detenido en pequeños elementos que encierran el Universo. No solo eso: Borges, según Piglia, lee desde el margen de la argentinidad, sin historia prehispánica y “con una tradición colonial pobrísima”, lo que le permite apropiarse de toda tradición literaria (como el propio Borges señala en El escritor argentino y la tradición).

Martín Kohan

La revisión de Borges resulta inevitable en la tradición literaria argentina. Ahora que hablamos de modos de leer y, por lo tanto, de formas de interpretar un texto, me gustaría terminar proponiendo un ejercicio sencillo.

El escritor, crítico y profesor Martín Kohan (1967), entrevistado por la también escritora Claudia Piñeiro (1960) para su programa Conversaciones en el laberinto (dedicado a Borges), realiza una interpretación del cuento Emma Zunz.

A diferencia de otros cuentos de Borges, construidos sobre operaciones matemáticas o teorías metafísicas, este parece más bien sencillo, directo. Cuando puedan, léanlo o reléanlo (pueden encontrarlo aquí). Inmediatamente después, vayan a la interpretación que propone Martín Kohan sobre Emma Zunz (va del minuto 6:00 al 10:04)

¿Ustedes hicieron la misma lectura? Yo no, pero a partir de esta, mi propia visión del cuento ha cambiado muchísimo. Como dice el mismo Borges en el prólogo de la Historia universal de la infamia: “A veces creo que los buenos lectores son cisnes aun más tenebrosos y singulares que los buenos autores”.