10 memes ridículos de librerías Crisol que probablemente alguna vez hemos encarnado

Librerías Crisol en memes: el culturoso insoportable que llevamos dentro

Crisol es la cadena de librerías más grande del Perú: cuenta con treinta tiendas distribuidas en diez departamentos. Es probable que muchas de ellas se ubiquen en zonas del país en las que, por mucho tiempo, no hubo ninguna (pienso en el Callao, por ejemplo: la primera librería que he visto en toda la provincia es la pequeña tienda que Crisol instaló en el Mall Aventura Plaza de Bellavista). Esa es su principal virtud, porque, al menos en mi experiencia, Crisol no destaca precisamente por la variedad de su catálogo, la calidad de su atención o el atractivo de sus ofertas, pero está cada vez en más lugares, y eso es positivo, ¿no?

Más allá de todo eso, más allá incluso del papel que Jaime Carbajal, su gerente general, jugó durante el segundo gobierno aprista, Crisol tiene una página de Facebook, que es sobre lo que quería hablar hoy. En ella, hace apenas algunos años, lanzaba promociones como esta:

Fuente: Perú.21

Esa fue la forma en que Librerías Crisol quiso “celebrar” el Día de la Mujer: afirmando algunos de los principios machistas que esa fecha, así como las actividades conmemorativas organizadas a su alrededor, buscan combatir.

La presión les hizo borrar el meme, y en adelante, las redes sociales notificaron al CM de la página cada vez que patinaba.

Este verano, por ejemplo, Crisol repitió el plato con las mujeres. Aquí va su meme:

Fuente: Crisol

Laura Grados explicó el mensaje del meme, que para muchos estaba oculto:

Del mensaje se desprende que:

1. Todas las mujeres usan maquillaje.
2. Para ser bellas, las mujeres necesitan maquillaje.
3. Entonces: Las mujeres con maquillaje son bellas. Pero las mujeres con buena ortografía son más bellas que las que tienen mala ortografía, por eso las mujeres con mala ortografía necesitan del maquillaje para alcanzar la belleza.

¿Cuántas de estas tres premisas se condice con la realidad? Exacto: Ninguna.

Mi impresión es que en las oficinas de Crisol algo han entendido algo de todo esto, o al menos quieren evitar el apanado, y ahora se cuidan un poco más. El problema es que los memes que les quedaron no son mejores que esos. Los he dividido en los tres grupos más recurrentes para poder comentarlos.

En principio, creo que ningún meme es original del fanpage. Es decir, los he visto varias veces antes, en otras páginas. Ahora bien, es elocuente que el CM haya escogido específicamente estos y les haya colocado el logo de Crisol, así como su tipografía y colores característicos: está de acuerdo con ellos y se hace responsables por su contenido.  

Otra cosa más, para ser transparentes: en muchos de estos memes, reconocí al niñito presumido y estúpido que fui yo mismo. Es bastante común que, alguna vez, nos hayamos sentido superiores a la vulgar mayoría porque hemos leído algunos libros, porque no decimos “subir para arriba” o porque tildamos adecuadamente las palabras. Esa conducta me parece explicable en cierta etapa de nuestra vida, sobre todo cuando estamos tratando de afirmarnos, y abrazamos aquello en lo que nos sentimos por encima del resto. Pero luego crecemos y nos damos cuenta de que a) no sabemos tanto como creíamos, b) nuestros gustos no nos hacen mejores ni más interesantes que nadie, y c) respetar todas las reglas ortográficas y gramaticales no nos exime de escribir huevadas.

Como decía, es probable que todos, alguna vez, hayamos encarnado un meme de Librerías Crisol. Es probable, incluso, que sigamos siendo un poco así, con códigos menos evidentes pero igualmente huachafos. Mirémonos, entonces: esto hemos sido, esto somos.

La obsesión por la ortografía

El CM de Crisol tiene —para usar un término de Alan García— una obsesión psicosexual con la ortografía. Según sus memes, respetar las tildes y el uso de las grafías puede, entre otras cosas, ayudarte a saber

Si te quiere:

Fuente: Crisol

Si es la persona indicada

Fuente: Crisol

O si te odia en secreto

Fuente: Crisol

En fin. Creo que la obsesión por la ortografía responde a una razón: es el rasgo más evidente en un texto. Cuando empecé a enseñar Lenguaje, ese fue el aspecto de las redacciones en el que ponía más interés, y fue también el que más consideraron mis profesores de la universidad al evaluarme. Sin embargo, no tardas mucho en darte cuenta de que las dificultades en torno a la ortografía pueden superarse con un poco de esfuerzo en la práctica (y con el hábito de la lectura, es verdad), pero que, en cambio, hay otros elementos de la normativa (la sintaxis, por ejemplo) cuyos errores son más difíciles de detectar y que, por tanto, tienen menos guardianes.  

Ni qué decir del contenido: un corrector de textos puede salvar los aspectos formales de un artículo, pero nunca su carencia de ideas. Y apenas se nota la protesta por esa deficiencia (bastante más extendida, por cierto, en nuestros medios locales).  

Los chistes (?)

Como establece la sabiduría popular, el chiste se cuenta solo. O, en palabras de Toño Vargas, “hablan las imágenes”:

¿? / Fuente: Crisol

Ni el programa de radio de Edwin Sierra. Fuente: Crisol

Las frases motivacionales y de amor

Ahora bien, si lo que quieres es afinar tu talento en las siempre difíciles artes el cortejo y el amor, el CM de Crisol tiene algunos consejos para ti:

Piropo infalible I:

Fuente: Crisol

Piropo infalible II:

Fuente: Crisol

Pero cuidadito con herir al ser amado, ah:

Fuente: Crisol

La superioridad

Estos son, quizá, los memes más mongos de Crisol. Juegan con la idea de que leer te hace más valioso que los demás, que hay determinados códigos que TIENES que conocer si quieres andar tranquilo por la vida, y que hay algunas actividades incompatibles con la lectura.

Está, por ejemplo, el muchas veces copiado meme de El Principito:

Fuente: Crisol

Tenemos también el meme de quien no va a fiestas, ni fuma ni toma ni baila pegadito, y se siente especial porque, en vez de eso, prefiere el café y la luna (¿?)

Ay, por Dios. Fuente: Crisol

¿Está mal que te gusten el café, la luna y los libros? No, para nada. ¿Está mal que no te gusten las fiestas ni las chelas? Por supuesto que no. Son tu tiempo, tu vida y tus gustos: haz con ellos lo que mejor te parezca. Pero, eso sí: no olvides que unos gustos no excluyen a otros, y sobre cualquier cosa, no esperes aplausos por quedarte en casa mirando la luna: se supone que lo estás disfrutando, ¿no? Bueno, ese es tu premio.